La primavera es la época más propicia para recoger espárragos trigueros, una maravilla de la naturaleza tanto para nuestro paladar como para nuestra salud. Frente al espárrago cultivado, se caracterizan por un sabor más amargo y un fuerte aroma. Este amargor no a todos gusta, a mí personalmente me encanta su textura tierna y carnosa, y su sabor a vegetal fresco y sabroso.
El espárrago triguero ofrece multitud de posibilidades en la cocina. Al vapor, a la brasa, a la plancha o con un simple aliño constituyen por sí solos un delicioso plato, aunque también son un ingrediente perfecto como guarnición de carnes y pescados. El espárrago es, por excelencia un vegetal diurético y muy recomendado por sus propiedades antioxidantes porque además tiene importantes cantidades de vitaminas C y E y provitamina A. EL ácido fólico es otro de sus componentes.
Gracias a su bajo contenido calórico (de aproximadamente 20 kcal por cada 100 gramos) su alto porcentaje de agua (90%) y a los nutrientes energéticos, es un alimento muy indicado en las dietas hipocalóricas. Además, gracias a su elevado contenido en fibra aporta sensación de saciedad, lo que ayuda a reducir el apetito.
Hoy vamos a preparar una deliciosa crema de espárragos trigueros, pero por supuesto se puede preparar con otras variedades de espárrago fresco.
Cubrimos en fondo de una olla con aceite de oliva a fuego medio.
Añadimos la cebolleta cortada en láminas o en juliana y lo rehogamos.
Lavamos bien el puerro, lo troceamos y añadimos a la olla.
Añadimos las patatas cortadas en láminas y seguimos rehogando a fuego medio unos 5 minutos vigilando que no se queme.
Cortamos los espárragos a mano hasta que el tallo presente resistencia, desechamos el resto. Lo añadimos al resto de los vegetales, que seguimos removiendo y mezclando durante unos minutos hasta que estén ligeramente dorados.
Añadimos el agua, subimos un poco el fuego para que entre en ebullición, y lo dejamos cocer durante 20 minutos a fuego medio.
Pasado ese tiempo pinchamos la verdura y si está blandita, podemos apartar del fuego.
Dejamos que se enfríe unos minutos y pasamos por la batidora de mano o de vaso hasta que quede muy fino.
Añadimos la sal y pimienta al gusto y la nata, volvemos a batir. Dejamos enfriar y la crema ya está lista para su consumo.
Sugerencia de presentación: a los niños les encanta con unos tropezones caseros de pan, pero también se puede presentar con unas puntas de espárrago que habremos previamente apartado y cocido aparte o salteado. En cualquier caso, está delicioso y es ideal como una cena reconfortante y ligera.
Ingredientes
Instrucciones
Cubrimos en fondo de una olla con aceite de oliva a fuego medio.
Añadimos la cebolleta cortada en láminas o en juliana y lo rehogamos.
Lavamos bien el puerro, lo troceamos y añadimos a la olla.
Añadimos las patatas cortadas en láminas y seguimos rehogando a fuego medio unos 5 minutos vigilando que no se queme.
Cortamos los espárragos a mano hasta que el tallo presente resistencia, desechamos el resto. Lo añadimos al resto de los vegetales, que seguimos removiendo y mezclando durante unos minutos hasta que estén ligeramente dorados.
Añadimos el agua, subimos un poco el fuego para que entre en ebullición, y lo dejamos cocer durante 20 minutos a fuego medio.
Pasado ese tiempo pinchamos la verdura y si está blandita, podemos apartar del fuego.
Dejamos que se enfríe unos minutos y pasamos por la batidora de mano o de vaso hasta que quede muy fino.
Añadimos la sal y pimienta al gusto y la nata, volvemos a batir. Dejamos enfriar y la crema ya está lista para su consumo.
Sugerencia de presentación: a los niños les encanta con unos tropezones caseros de pan, pero también se puede presentar con unas puntas de espárrago que habremos previamente apartado y cocido aparte o salteado. En cualquier caso, está delicioso y es ideal como una cena reconfortante y ligera.
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